Cómo crear un buen ambiente para trabajar desde casa
Conseguir el mejor ambiente para trabajar en casa es una cuestión por la que cada vez se preocupan más personas. Y es que la situación actual, marcada por la pandemia y las restricciones derivadas de la misma ha traído consigo múltiples cambios. Uno de los más importantes, la obligación, para muchos trabajadores, de ejercer sus labores profesionales desde su propio domicilio. Las limitaciones a la presencialidad en oficinas y otros ambientes profesionales han marcado un antes y un después. El Covid 19 nos ha impulsado con fuerza hacia una nueva época marcada por una tendencia al alza: trabajar desde casa.
Para que te hagas a una idea, según datos del Estudio para la Investigación de Medios de Comunicación (AIMC) de todos los trabajadores que se encuentran a día de hoy en una situación de teletrabajo, únicamente un 29 % lo hacía ya a finales del 2019. Mientras que el 54 % comenzó a trabajar a distancia durante el año 2020. Lo que quiere decir que para la inmensa mayoría significó un cambio repentino al que tuvieron que adaptarse de un día para otro. Y así, cada uno se encontró obligado a desarrollar su labor en la distancia, sin tiempo suficiente para preparar un buen ambiente para trabajar en casa.
Prácticamente ha pasado un año desde el comienzo del estado de alarma en nuestro país. Y todavía hoy nos hallamos sumidos en un clima de limitaciones. Pero las circunstancias para los trabajadores y empresas han cambiado, gracias a la perspectiva que aporta el transcurso de tantos meses. Ya que han tenido tiempo para ir adaptándose y acostumbrándose a sus nuevas ubicaciones y circunstancias laborales. De hecho, desde ambas partes, surgen planteamientos, consejos, e incluso manuales para ayudar a sobrellevar la situación de la mejor manera posible. Si tú aún no lo has hecho, ahora es el momento. Sigue tu propia receta y cocina tu espacio añadiendo tus ingredientes favoritos.
¿Cómo preparar el ambiente para trabajar en casa?
En ocasiones puede parecer difícil comenzar en una nueva situación, todavía desconocida. Otras veces, resulta complicado encontrar la forma de adaptarnos o de sentirnos cómodos. Pero siguiendo esta pequeña lista de consejos seguro que lo consigues. ¡Apunta!
1. Delimita un espacio de trabajo determinado
Escoge un lugar y conviértelo en tu pequeña oficina. Intenta que esté separado de zonas de paso y televisores. Y, si tienes niños, es conveniente también que tu lugar de trabajo se encuentre lo más alejado posible de los lugares que utilizan para juegos, etc.
Piensa que las posibles distracciones son el mayor enemigo de tu tarea. Y en ese caso, por mucho que te esfuerces en cuidar el ambiente de trabajo en casa, no te servirá de nada. La atención y la concentración son claves para teletrabajar con éxito. Por eso, igual que en tu cabeza debes aprender a separar y compartimentar temas y momentos, los espacios de tu domicilio también deben estarlo.
2. Aprovecha la luz natural
Es un hecho que la luz natural cambia la visión de las cosas. Y no nos estamos refiriendo a que contribuye a la calidad de esa visión. Si no más bien a que nos afecta de forma fisiológica. Es decir, la luz natural ejerce una influencia sobre nuestro organismo. Ya que, biológicamente, nuestro cerebro se encuentra programada para, al percibir esa claridad, activarnos. Además, cada uno está marcado por sus biorritmos, y estos se encuentran directamente relacionados con esa luz.
Así que, ya sabes, coloca tu mesa en una habitación abierta al exterior. Y, si puede ser lo más cerca de una ventana posible, mejor. Pero, si no es posible, hazte con una luz artificial adecuada a la vista y a tu tarea. La visión es una de tus armas de trabajo, cuídala.
3. Intenta mantener tu oficina casera organizada
La organización y la concentración se encuentra estrechamente vinculadas. Está demostrado que una mesa desorganizada, llena de objetos innecesarios o fuera de su sitio, es un camino directo hacia el despiste. Ten cerca solo los documentos imprescindibles y procura archivar los demás papeles en sitios accesibles.
Y, en cuanto a la decoración, aprovecha que estás en tu propia casa para hacerlo a tu gusto. Personaliza tu mesa con colores tranquilos y coloca unos cuantos objetos que te gusten. Porque, cuando estamos en un espacio que nos gusta y nos agrada, estamos más contentos, más tranquilos y trabajamos mejor.
4. La ventilación es importante
Es muy aconsejable renovar el aire cada cierto tiempo para sentirte bien. Pues, cuando vas a pasar bastantes horas en un sitio, el aire terminará por estar cargado. Ventilar significa refrescar el ambiente para trabajar en casa que te has preparado. Además, no olvides que estás trabajando en tu propia casa, donde también cocinas, comes o duermes. Abre la ventana y destierra los aromas de tu vida cotidiana antes de ponerte a trabajar. Siguiendo esta misma línea, presta atención a los olores. No solo a limpiar el aire, sino a perfumarlo con olores suaves y agradables. Y, si es necesario recurre a ambientadores o velas, aprovechando todo el material que hay en el mercado.
5. Recuerda esta palabra: ergonomía
Tu espacio debe adaptarse a ti en el sentido más amplio. Y para ello mantener una buena postura es fundamental. Porque, no olvides que vas a pasar allí bastante tiempo, sentado frente a la pantalla de tu ordenador. No se trata tan solo de buscar la comodidad, sino de evitar malestar postural, o incluso posibles lesiones. Por eso, lo más conveniente es intentar hacerte con una mesa y una silla apropiadas. Procura que se adapten a tu cuerpo y al tiempo que vas a pasar sentado. Asimismo cuida la distancia al que se encuentra la pantalla del ordenador, o la altura a la que está la mesa. Tu cuerpo te lo agradecerá.
6. Añade un toque verde y espolvorea con sostenibilidad
Colocar plantas en tu espacio de trabajo, o cerca, va a relajar el ambiente para trabajar en casa que te has creado. No solo porque estéticamente son agradables, sino porque, de alguna forma, los elementos naturales alivian la tensión ambiental. Además ejercen una importante labor oxigenando el aire.
Por otro lado, no olvides la sostenibilidad. Hoy en día, la mayoría de las oficinas instauran políticas relacionadas con la responsabilidad medioambiental. Y eso no tiene por qué cambiar en tu propia casa, al contrario. Aprovecha para potenciar estas características al máximo, y a tu manera: luces LED, poco papel o papel reciclado, etc. Hay muchas maneras de ayudar al planeta, e incluso puedes hacerlo mientras trabajas.
Algunos consejos más
Cuando preparas tu ambiente para trabajar en casa no puedes ceñirte solo a una lista de consejos y las circunstancias de un hogar no pueden circunscribirse a un listado.
Parte de tu casa eres tú mismo. Así que dentro de tu espacio de trabajo, piensa también en ti. Prepara una pequeña zona de descanso o para dedicarte a otras tareas. Aprovecha momentos de descanso para sacarle partido a tu pequeña instalación. Lee, escucha música, aumenta tu formación, etc. Define tiempos y lugares, y pon tus propias reglas.
Cuando has creado el ambiente para trabajar en casa que quieres, ya estás preparado para empezar.
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